Continuen les mostres de condol per la desaparició del professor Rafael López

Concentració silenciosa en memòria
de Rafa López al pati de l'IES l'Estació

La sobtada mort de Rafa López, professor de llengües clàssiques, ha colpit tota la comunitat educativa del centre, que des del passat cap de setmana plora la pèrdua d'un "bon home", un "mestre", un "savi", qualificatius que signen els membres de Kukopolitai, el grup teatral de l'IES l'Estació que Rafa va fundar el curs 2015-2016 i que està compost per joves promeses del nostre institut. En la retina de tothom sempre romandrà indeleble el majestuós vol que van emprendre Les aus una solejada jornada del mes de maig.

Aquest és l'últim homenatge que li han volgut rendir al desaparegut docent els components de Kukopolitai.

Hasta siempre, Rafa

Todo empezó un soleado lunes de septiembre en una vieja aula del longevo IES L’Estació. Era la última hora de aquella segunda jornada del curso anterior cuando, como un profesor más, entró el hombre que nos iba a cambiar la vida. Lucía una frondosa barba y llevaba puesto ese chaleco suyo lleno de bolsillos donde guardaba toda clase de cosas, desde su estimado reloj de bolsillo hasta el inseparable tabaco. Ese primer día, su clase nos pareció como la de otro docente más, sin que destacase en absoluto. Eso sí, nos dimos cuenta de que en ese hombre alto y (según nuestra opinión) con apariencia de “profeta” había algo fuera de lo normal, aunque no le dimos mucha importancia. A medida que iba avanzando el primer trimestre, mientras nos daba nuestras primeras nociones sobre el alfabeto griego y nos amenazaba con ponernos negativos en el temido “Yeti” (su cuaderno de evaluación), empezó a gestarse una confianza mutua que, a partir del segundo trimestre, desembocaría en un vínculo tan fuerte que nada en el mundo podía (ni podrá) romperlo. Fue a partir de entonces, en el momento en el que empezamos los ensayos, cuando descubrimos al verdadero Rafa: el Rafa creativo, bueno; el Rafa que ponía todo su empeño en una cosa para poder mostrar al mundo algo que realmente mereciese la pena; el Rafa que pasaba de enfadarse porque eso nada bueno aportaba; el Rafa místico y misterioso. Pero, sobre todo, descubrimos en él cuán humilde y discreto puede llegar a ser el ser humano, pues jamás quería que se le reconociera aquello que hacía. Cada vez que parábamos de actuar durante los fines de semana para descansar, nos sentábamos todos para hablar y, casi siempre, escuchar embelesados sus consejos e historias que tanta curiosidad e interés nos causaban. Eran ratos muy agradables que nadie deseaba que terminaran, pero había que practicar, pues teníamos el bonito propósito de presentar una obra de calidad.

Preparant el projecte Las aves amb l'AMPA  del centre

Después de pasar meses yendo al instituto los sábados y los domingos y de fabricar el atrezo sin descanso, llegó por fin el gran día, el día en el que mostraríamos a todos lo que éramos capaces de hacer. Fue un día glorioso aquel, sobre todo una vez concluida la obra, pues todos estábamos exultantes por el buen resultado de nuestro trabajo, a pesar de los grandes incidentes que padecimos (como el ataque epiléptico de Nayely, que nos conmocionó, durante unos instantes, a todos). Esa noche celebramos el éxito con gran regocijo y, más tarde, pronunciamos el discurso por el cual seríamos aceptados o rechazados para continuar con la preciosa empresa que habíamos empezado. Todos los que lo hicimos fuimos aceptados.

Segona representació de Las aves

Al cabo de un mes, Kukopolitai volvió a representar Las Aves, que había sido enriquecida gracias a nuestras cómicas ocurrencias. El resultado que obtuvimos fue equivalente al de la otra vez y, aquella velada, celebramos el triunfo con gran magnificencia. Nos lo pasamos en grande y, para algunos de nosotros, fue la última vez que pudimos hablar largo y tendido con  nuestro Rafa. Muchos lo vimos por vez postrera el día que terminábamos el curso y por eso nos despedimos de él con ligereza, esperando volverlo a ver dentro de un breve período de tiempo para reanudar el proyecto que habíamos iniciado y conseguir que Kukopolitai  pudiese mostrar su esplendor a nivel autonómico e, incluso, nacional.

Pero ahora te has ido, Rafa, y nada volverá a ser como antes. Te has transformado, tu alma reposa en paz junto a tus padres en el sueño eterno, aliviada ya de las cargas de este mundo. Dicen que los muertos descansan en paz, pero los que todavía permanecemos en la Tierra estamos aturdidos y confusos, incapaces de asimilar la gran pérdida que hemos sufrido. Ahora tus planes, que también eran los nuestros, han sido frustrados por este suceso y, si intentamos llevarlos a cabo de nuevo, será dentro de un tiempo todavía indefinido.  En el caso de que esto suceda, verás que nos costará pero, como tú decías, lo hermoso es difícil.

Que todos sepan que se ha marchado un buen hombre, un maestro, un sabio. Un ser humano que deja una profunda huella en el corazón y que te cambia la vida para siempre.

Allí donde estés, hasta siempre Rafa.

Èxit absolut durant l'estrena de la comèdia d'Aristòfanes