L'alumnat
de quart d'ESO de l'IES l'ESTACIÓ se suma al rebuig general a les revàlides i
demana la seua supressió
En un any, els alumnes que
finalitzen la secundària obligatòria hauran d'aprovar un examen extern per
obtindre un títol i poder seguir estudiant. Parlem de les (anomenades
col·loquialment) revàlides que contempla la Llei Orgànica per a la Millora de
la Qualitat Educativa, la LOMQUE. Aquestes avaluacions finals no sols són
rebutjades per la gran majoria de comunitats autònomes, sinó també per la
principal federació de directors d'institut, la Fedadi, que sol·licita la seua
eliminació.
El següent article, escrit
amb el sarcasme característic de la seua autora, Paula Torró Albero, posa en evidència l'opinió generalitzada de
l'alumnat que conclou enguany etapa educativa.
Disculpen...
¿Quién está al mando?
Por
Paula Torró Albero, alumna de 4º B
Imatge de les proves PAU 2016 |
A ver, señores, aclarémonos. Si quieren
seguir gobernando cuatro años más, es imperativo que entiendan que un solo
examen no puede aglutinar los conocimientos adquiridos en cuatro años de
aprendizaje. Es como si, por ejemplo, le pidiéramos a Stephen Hawking que nos
hiciera un resumen escueto acerca del origen de los agujeros negros. No creo
que nadie se atreviese a cometer semejante disparate y si por casualidad
tuviera tan poco seso y lo hiciese, Hawking, claramente, cogería su silla y
daría media vuelta.
En segundo lugar, tienen las
reticencias manifiestas de la Fedadi. Si me remito a los conocimientos
recientemente aprendidos en el instituto, me consta que este es un argumento de
autoridad. Desde mi punto de vista, no es recomendable desoír argumentos de
profesionales reputados en la materia. En fin... ustedes verán.
Finalmente, hay que considerar que el
alumno que se enfrente a la reválida no es más que un adolescente. Es decir, no
tiene la templanza y capacidad de resolución de un adulto. En mi opinión,
someter a alguien tan joven a semejante encrucijada debería estar tipificado en
el Código Penal. Considero que los nervios no dejarían razonar lúcidamente al
sujeto. Probablemente, el pobre muchacho pensaría más en el hecho de quedarse
en el limbo que en si las ecuaciones de grado superior se resuelven por
Ruffini.
En conclusión: no a la reválida (por si
no estaba suficientemente claro). Pero, por último, me gustaría adjuntar una
humilde sugerencia: ¿y si nuestro futuro académico fuera decidido por expertos
en la materia (profesores, psicólogos...) en lugar de por un puñado de sexagenarios
que acabaron la carrera el siglo pasado?
Ahí lo dejo...
Imatge de les proves PAU 2016 |
Imatge de les proves PAU 2016 |
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada